La Habana, mi linda Habana

La Habana, mi linda Habana

viernes, 28 de enero de 2011

UN LINDO MENSAJE RECIBIDO



Que la luz alumbre tu camino*

...Que las estrellas guíen tu búsqueda;
que la dulce lluvia acaricie tu corazón;
que la suave brisa despierte tu sonrisa;    
que el amor despierte la luz que hay en ti;
que la vida te fortalezca con el don de la ternura;
que los sueños te revelen la esperanza;
que la libertad se derrame dentro de ti;
que el miedo abandone tu mente;
que la paz inunde tu espíritu;
que la compasión crezca dentro de tu alma;
que la fuerza te acompañe frente a la adversidad;
 
...Que siempre tengas Luz para iluminar tu corazón
y tu camino...
...Que tengas la entereza para afrontar la adversidad
y la  fortaleza para  vencerla...

... Que te sientas que mereces ser feliz...
...Que no pierdas la capacidad de soñar
y sentir que tus sueños son el  comienzo de una hermosa realidad...
Desconozco el Autor.


 

jueves, 27 de enero de 2011

LOS CUBANOS

 Cuando Dios hizo al mundo, quedó tan asombrado por la bonitura de su obra, que dejó caer entre los dedos cascajos involuntarios que fueron la más bella chambonada de la creación: el archipiélago cubano. 
 
Conmovido por la feliz casualidad, no puso en él ni fieras ni escorpiones,
ni víboras ni volcanes, ni cosa alguna que lastimara a los soñadores de la intemperie.
Fue así que con el tiempo y los sucesos nació lo criollo en el aluvión de las razas, golpe de amor y faena, en la obsesiva añoranza de ser
país, nación, desmesura de lo suyo.

De España heredaron la adarga y la terca altanería quijotesca; de Africa el pié fácil para el baile, el oído musical, la sonrisa a ultranza; de China la tenaz resignación y el misterio; de Francia la discreta elegancia
del amor en pareja y los adornos de la vida.

Todo el aire que respiran viene del mar, la arena de sus playas es como polvo de oro, en su tierra la semilla germina sin ayudas, no tienen inviernos ni veranos, sino todo lo contrario, con una media de 25º C.  imprevistos y efímeros aguaceros y una corta temporada en que las masas
frías anulan algunas horas el paisaje.

Al cubano le gusta el buen vivir sin debérselo a nadie y para conseguirlo ejercita todas sus artes y mañas, apela a la suerte, a lo divino, o lo resuelve con picardía tropical. Aunque todavía usan bueyes para roturar la tierra, ya se ven desde el cosmos y comprueban que los cartógrafos no se equivocaron al dibujarlos con silueta de caimán.


Apuestan siempre a tener lo mejor, ya sea la mujer o la tumba, los zapatos
o el sillón del portal. Les gusta la mesa bien servida, el menú diverso, la suma sabrosa del congrí, el pollo frito y los tachinos, el tasajo con boniato,el picadillo con papas fritas, el puerco asado y la yuca con mojo, los frijoles negros, el huevo frito, el chilindrón, el fricasé o el ajiaco resucitador.
Son también apegados al dulce, los cascos de guayaba con queso, el ajonjolí y la garapiña, el boniatillo y la raspadura, los merengues y caramelos, pero lo mejor de su dulce azúcar pasa por los alambiques y termina en los
toneles donde se añeja un ron superior. Y al final, la imprescindible tacita de café, sabroso, aromático, y el habano de perfume sonsacador,quizás lo único que les sigue identificando con los primeros cubanos.

Pero también saben sentarse a la mesa escasa, si no hay pan comen casabe,
todos los días repiten el milagro de los panes y los peces, son inventores audaces de la sobrevivencia.
El cubano lo sabe todo, lee los periódicos entre líneas y solo necesita un par de cervezas para arreglar el mundo.

Eso sí, es de memoria flaca,
no devuelve libros prestados y sólo se acuerda de Santa Bárbara cuando truena. La necesidad ha sido su maestra, el orgullo su consejero, pero atienden más a las razones del corazón que a las evidencias de la oportunidad y la conveniencia.

Son gente de paz, no les ciega la victoria, pero no saben perder. Enfrentaron la dominación colonial con coraje, pelearon en condiciones inferiores contra tropas más numerosas que la suma de las emplazadas contra O´Higgins, San Martín, Bolívar y Washington.

Entre ocho mil especies de su rica flora adoran a la ceiba; respetan la palma real, árbol nacional; su flor es la mariposa; y el ave nacional es el tocororo.

Su deporte es la pelota, su juego el dominó, con piezas que suenen fuerte sobre la mesa. Necesitan muy poco espacio para ser felices: saben multiplicar los domingos, son fiesteros, desinhibidos, noveleros, rehusan el tratamiento de usted, entran en las casas hasta la cocina, se burlan de su propia desgracia, hasta en los funerales se cuentan chistes.

Son el mejor amigo del perro, cohabitan también con gatos, cotorras y gallos finos. Les gustan las azoteas, los balcones, el rumor de las
guitarras y los ríos, el resplandor bullicioso del carnaval, la playa,
el malecón, la guayabera, la cerveza helada. Son dicharacheros, escandalosos, desmesurados. Hijos del cálido clima en los límites tórridos, se les tilda de violentos, improvisadores, tropicalmente despaciosos, amigos del choteo y del relajo, expansivos, inconstantes, derrochadores, presumidos.

Desprecian a los delatores, envidiosos, a los cazadores de oportunidades ajenas, detestan la ambición, la mentira y la avaricia, la doble cara y el lamento. Saben apreciar lo grandioso de la menudencia, la brevedad de la vida, el sentido obligado de la reciprocidad, aunque, como dijera un patriota, a veces no llegan y otras se pasan.

Creen en el azar, el martes trece y los horóscopos, en la cartomancia, el biorritmo y el mal de ojos. Tienen varios dioses y cielos,su Olimpo está disperso de Nairobi hasta Roma. Cuba es hacendosa y constante, candorosamente hospitalaria, espontánea, solitaria, material noble para cualquier noble empeño. Es también una palabra bonita como guaracha,mulata, guateque, siboney.

Son buenos en los oficios y artes, y también en el amor, que hacen con vehemencia y concediéndole tiempo al encanto. No les asustan los huracanes ni los augurios, si se miran a un espejo, ven la buena voluntad con biografía complicada.

Son, en fin, lo que son:


CUBANOS



















domingo, 16 de enero de 2011

Recuerdos de mis quince años


Reviviendo recuerdos, al cumplir mi nieta sus quince años, me puse a ver en el cajón de los recuerdos las fotos de cuando yo tenía esa edad. ¡Edad maravillosa! En que uno está lleno de ilusiones y sueños, y se cree  que todos se van a realizar.
En verdad, las cosas han cambiado, pues de mis quince años hace 47 años, casi nadaaaaa.
Les  cuento que en  Cuba los quince años son una fecha especial para cualquier chica, es lo que marca su paso de niña a adolescente, no digo adulta aunque muchas se creen que lo son al alcanzar esta edad, porque la mayoría de edad no es hasta los 18 años.
Actualmente a pesar de las penurias económicas, cada chica sueña con sus quince, y cada mamá se exprime al máximo, y recaba la ayuda de toda la familia para que su niña no se quede sin quince. Lo primero son las fotos, una verdadera odisea como si fuera una modelo, se cambia de vestido innumerables veces, ya imaginarán cuanta ropa hay que comprarle, aunque a veces es prestada o facilitada por la empresa particular del fotógrafo. La maquillan como a una artista de cine, le ponen poses super ficticias, y hay una foto especial que a mí nunca me gustó, la foto saliendo de la ducha envuelta en una toalla, me parecía fea y de mal gusto.
Bueno, después de las fotos viene la fiesta, que en algunos casos, y según los deseos de las chicas y el poder adquisitivo de los padres puede ser de parejas con coreografía de baile, como si de un show de un cabaret se tratara, o puede ser una fiesta sencilla, o un viaje a la playa a alojarse en un hotel, cosa novedosa para los cubanos de ahora. Como se pueden imaginar, todo esto hace un gran agujero en los ahorros de los pudientes, y mucho más en los medio pudientes, pero siempre me he preguntado como casi todos los padres pueden celebrarlo, no sé cómo, pero en  Cuba ninguna chica se queda sin celebrar sus quince ni sin sus fotos, las que luego está enseñando durante un año, o más a todas sus amigas como un trofeo, jajajaja.
Mis quince, 47 años atrás no fueron así, las cosas eran más sencillas, a pesar de que mi familia tenía un buen nivel económico, no había esas costumbres tan complicadas. Yo no quería fiesta, porque en la adolescencia tuve mis majaderías, pedí una fiestecita pequeña para divertirme bailando, pero que va, enseguida mi querida tía Nina, dijo que no, que eso no podía ser, pues les aclaro, que si las cosas eran menos complicadas, la importancia de los 15 años era la misma para todas las muchachas. Esa edad marcaba que nos dejaran empezar a pintarnos los labios, que pudiéramos afeitarnos las piernas y ponernos faldas estrechas, vestirnos como jovencitas y usar tacones. Bueno, el caso fue que mi prima Tere había cumplido los 15 un año y medio antes, y mi tía le preparó una fiesta lindísima, mi padre la ayudó económicamente para que todo pudiera salir bien, y ella ahora se veía obligada a que yo también tuviera una fiesta igual.
Ahora se lo agradezco, porque me organizó una fiesta maravillosa, en el mismo lugar que la de Teresita, pero más linda todavía. Viendo las fotos me vienen tantos recuerdos a la mente como no se pueden imaginar. Mi tía era muy detallista, y lo organizó todo perfectamente, agrupó a los invitados con otros que fueran amigos, y que tuvieran los mismos intereses y parecida edad. La verdad que todo el mundo la pasó muy bien.
Mi fiesta era de parejas, catorce parejas que bailaban una coreografía, y mi pareja y yo hacíamos la 15. El coreógrafo fue Fabelo, un señor que se dedicaba a eso, además de ser trabajador bancario y tenía un gusto maravilloso para hacer coreografías. Pero nada de efectos espectaculares, de brincos ni de poses estudiadas, todo muy natural, jajajaja, no como hoy en día que parece que el show de Tropicana lo llevan a los salones de baile. Y nada de cambio de trajes, yo pasé toda mi fiesta con el vestido largo ese que ven en la foto, y nada más, me divertí de lo lindo, pues todos éramos amigos, y bailamos hasta las 2 de la mañana.
No nombré “el pique”, que es la fiestecita que se hace una semana después de la fiestona, en la casa y adonde van las 14 parejas que bailaron el vals de 15 y otras amistades cercanas, y dónde los jóvenes suelen divertirse aún más que en la fiesta convencional.
Bueno, yo no quería fiesta, pero tuve fiestona, y pique, y además como ninguno se celebró el mismo día de mi cumpleaños, también tuve un viaje al Cabaret Parisién con 7 parejas de mis amiguitas y sus novios, ese día.  La fiesta no se celebró el día de mi cumpleaños por problemas con el local, ya que en esa época estaban los cambios de la Revolución en su apogeo, y el salón lo iban a cerrar para poner una escuela de milicias allí y hubo que adelantar la fiesta. El salón era el Sierra Maestra del Hotel Habana Libre, el anterior Hilton de La Habana, que estaba en el piso 25 con una vista panorámica de toda la ciudad preciosa, no se podía escoger un lugar más hermoso que ese para una fiesta de quince años.
Hubo problemillas, derivados de la situación de los cambios revolucionarios, pues cuando algunos vieron que se iba a celebrar una fiesta particular, en que no podía entrar “todo el pueblo” dijeron que iban a sabotear esa fiesta de esos burgueses, y que iban a entrar a la fuerza. Bueno, pero no pudieron, porque como estaba tan bien organizada, hasta un compañero de mi padre de la Quinta Covadonga que era miliciano, como casi todos los trabajadores que tuvieron que hacerse milicianos porque sino eran catalogados como contrarios a la revolución, nos ayudó a cuidar el salón, lo pusieron en la puerta cuidando para que nadie pudiera entrar, y se neutralizó la situación.
En mi época no se pensaba en comprarse muchos vestidos para esa fecha, ni hacerse muchas fotos ni nada de eso, con el tiempo, todo se volvió más rebuscado, y hasta video clips le hacían a la muchacha bailando y cantando como su artista preferida, yo siempre he pensado que era una exageración toda esa celebración, “de lo sublime a lo ridículo no hay más que un paso”.
Aquí en España no se celebran los quince años. La fiesta principal de todo niño es su Primera Comunión y se celebra a bombo y platillo, con una cena costosísima y regalos caros.
Mi nieta cumplió sus quince, el día 12 de este mes, y subí al blog el enlace de su fiesta. Quedó muy buena, pero nada al estilo de Cuba, un baile en una discoteca con sus amigos del Instituto, y se divirtió mucho, pero no podía faltar la costumbre cubana, del pique, y el día 12 le cortamos una tarta con cuatro de sus amigas y bailaron ellas un buen rato, pues la fiesta fue el sábado 8 en Kudhabi Oviedo.

martes, 11 de enero de 2011

Les dejo el link de las fotos de los 15 de Jenny, mi nieta.


Aquí les dejo un recuerdo bien bonito de las fotos de los quince años de mi nieta Jennifer, que se celebró el sábado pasado en la discoteca Kudhabi de Oviedo. La pasó fenomenal con sus amigos y compañeros del Instituto de La Corredoria. 
¡¡¡¡Mil felicidades mi querida Jen!!!! 
"  Mi rayito de sol en un día nublado, como le digo yo desde que nació".

sábado, 1 de enero de 2011

Mis primos y yo


Revolviendo en el cajón de los recuerdos, encontré esta foto que me hizo reír a carcajadas. La de la izquierda soy yo, como ven una niña obesa, carona y muslona como la que más, jajajaja. Mi madre era una amante de la gordura, ella decía que "la gordura es la hermosura y la flaquencia la feencia", y se afanaba por tenerme bien gordita como ustedes pueden ver en la foto. Como no quería beber leche, porque no me gustaba mucho, me hacía natilla que me encantaba y me encanta todavía, y me daba hasta 6 pozuelos diarios, ya saben, esa es la receta para tener un niño obeso.
El del medio es mi primo Jorge, del cual he hablado en este blog, era el que nos visitaba y pasaba largas temporadas en mi casa. Cuando tenía tres años, según me contaba mi madre, no le gustaban nada mis visitas a San Diego, y en su lenguaje enredado decía: Ñoooo, que ganas tengo que se vaya Rina!!!, imagínense no lo dejaban jugar mandándolo a callar porque despertaba a Rina que era una bebé recién nacida.
La de la derecha es mi prima Teresita, la hermana que tuve de pequeña, con la cual siempre estaba peleando como buenas hermanas, yo le decía: Eres una "egoirista", porque no me quería prestar las muñecas. Ella siempre fue muy cuidadosa, y con los juguetes más todavía. Y Rina, pues destripaba a las muñecas para ver que tenían adentro, o para operarlas de apendicitis. Las maquillaba, y les cortaba el pelo, con la idea de que seguro que le iba a volver a crecer. Así que imagínense el sufrimiento de Tere si tenía que prestarme una muñeca. Lo curioso es que teníamos las mismas, pues nos las compraban a la par, si mi tía le compraba una a ella, también me compraba una a mi. Y así también hacían mis padres, lo que me compraban a mi, se lo compraban a ella también. Sin embargo, a mi las que me gustaban eran las de ella, pero a ella no le gustaban las mías, y era motivo de discusión constantemente. Cuando nos castigaban, nos separaban y no nos dejaban jugar por una semana. Yo aprovechaba que vivíamos al lado y las casas se comunicaban por el patio y me escapaba, me asomaba a la ventana del cuarto de ella, y jugábamos a través de la ventana, todo un caso.
De todas formas esos son recuerdos muy hermosos para mi. En esta época de mi vida, estoy alejada de ambos, pues Teresita se quedó viviendo en Cuba y no tenemos mucha comunicación, aunque de vez en cuando sabemos una de la otra. Jorge, que vive en los Estados Unidos no tiene mucha comunicación con nadie de la familia. He sabido de él cada 5 o más años y luego se vuelve a interrumpir la comunicación, pues no le interesa estrechar lazos. Tengo otro primo, en Estados Unidos también, pero en la época de esta foto, no había nacido. Crecí sin mucho roce con él, por la diferencia de edad y por vivir muy lejos uno de otro, pero sin embargo, con él si tengo lazos afectivos y comunicación muy a menudo, pues tanto él como yo deseamos esta comunicación familiar. Nuestras madres fueron hermanas y mucho que se amaban, será por eso que ellas nos empujan a tener este lazo afectivo. Bueno, seguiré revolviendo el baúl a ver que encuentro para compartir en el blog. Saludos y Feliz Año Nuevo a quien me lea.